Hansi Flick jugó fuerte para este partido frente al Mallorca. Tuvo valor para dar entrada a muchos de los no habituales del equipo. Entre ellos a Ansu Fati y Héctor Fort que habían mostrado su enfado el pasado fin de semana cuando no tuvieron minutos frente al Celta. Fue una decisión arriesgada porque en el fondo ambos jugadores le habían desafiado públicamente con una reacción que no había gustado a Flick. Así lo dijo en la previa del partido. Y tenía su riesgo porque parecía que de alguna manera estaba premiando a estos jugadores. Que demostraran su rabia en el campo, debió pensar.
La verdad es que ambos hicieron un buen partido, por lo que hay que interpretar que las decisiones de Flick tuvieron el resultado deseado. El Barça tuvo un sinfín de oportunidades, pero solamente les faltó la puntería y les sobró Leo Román. Un once que, además, permitió dar minutos de descanso a muchos jugadores importantes de cara al trascendental partido del próximo sábado en la final de Copa frente al Madrid. Raphinha, Koundé, Cubarsí y De Jong pudieron dar descanso a unas piernas que a estas alturas de temporada empiezan a estar muy cargadas.
Dentro del rosario de cambios que hizo Hansi Flick en el once inicial, hubo uno que llamó la atención y fue la situación en el campo de Eric García que sustituyó a Koundé en el lateral derecho. El futbolista se está convirtiendo en el comodín del entrenador porque con esta ya ha jugado en cuatro demarcaciones esta temporada. Como central, tanto en la derecha como en la izquierda, de pivote en el centro del campo y ahora de lateral derecho. Y pasó la prueba con nota. Dio la asistencia a Olmo en el gol.
Pedri sigue estando a un nivel sobresaliente. En la primera parte fue el indiscutible motor del equipo dando algunos pases extraordinarios dejando en clara ventaja a sus compañeros. Especialmente bueno fue uno a Ansu Fati al que dejó solo ante Leo Román, pero no acertó en el chut. En la segunda mitad siguió con su recital de pases y control del partido.
La primera parte desesperó a los jugadores azulgranas, a Flick y a todo Montjuïc. El Barça tuvo un sinfín de oportunidades para marcar. Realizaron 24 remates en total, seis de ellos entre los tres palos. Pero entre Leo Román, que hizo un partido espectacular, la falta de puntería culé o los propios jugadores del Mallorca que bloquearon varios chuts que iban a puerta, el Barça se quedó sin marcar. En cambio, en el primer remate de la segunda mitad a los 40 segundos, Olmo logro abrir el marcador.
Lo de Leo Román fue espectacular. Si no es por él la goleada a favor del Barcelona hubiera sido de escándalo. Pero el guardameta del Mallorca lo evitó con una actuación soberbia. Amargó la noche a todos los delanteros azulgranas que se estrellaron una y otra vez, salvo en el gol de Olmo. Lamine Yamal, el propio Olmo, Ferran, Ansu, Pau Víctor, Fermín… todos se estrellaron en él.